Ayer, después de la rutina de la burocracia y enfrentando 27 km. a recorrer en esta megalópolis llamada: Ciudad de México, Chilangolandía, DeFectuoso, Valle de Anahuac, pedacito del cielo o del infierno; quise hacer mi obra buena del día.
Tome la mascara de Blue Demon que compré afuera de la Arena México (si la catedral de la lucha libre) y a la altura de Av. Patriotismo, Betoman, el burócrata dejó su mala vibra de conductor que acelera, frena, claxon, acelera, frena, claxon, que no cede el paso, que al ver una direccional echa el coche, que no deja pasar al peatón, que no sonríe, que se frustra por ese mal cotidiano del transito vehícular, para dar paso al Super Conductor Chilango!!!
Así es mi estimado lector, Blue Demon al volantes es cortes, es decente, es amable, sonríe a los niños y cede el paso a los ancianos, en pocas palabras, B.D.A.V. (Blue Demon Al Volante) aliviana el mal viaje diario, por que cada vez que un automovilista con cara de aguacate voltea al coche contiguo y se da cuanta que es B.D.A.V. su actitud cambia y ríe, y se da cuenta que esta Ciudad es surrealista.
A mi en lo personal, me cambia esa hora que paso tras el volante, me relaja y me hace reír mucho con las caras que pone la gente al darse cuenta que 1) le ceden el paso 2) el que le cedió el paso es nada mas y nada menos que B.D.A.V.
Y lo mejor es cuando la gente me saluda, y yo les devuelvo el saludo, o cuando los polis de las esquinas se me quedan viendo y levantan la mano para responderme el saludo, es increíble!!
Así que imagínense si cada uno de nosotros pusiéramos nuestro grano de arena cambiando de actitud en el transito, habría mas mascaras de luchadores en la calle, mas buena vibra, mas surrealismo que mantenga la magia de esta gran gran ciudad.
2 comentarios:
Ja ja ja...Buenísimo. Es increíble lo que ocurre cuando dejamos de ser lo que siempre somos por unos momentos, el mundo pareciera algo totalmente diferente. Creo que cuestión de percepciones.
No sería mala idea una campaña de Blue Demond por la Ciudad de México, por un día viviendo la cortesía.
¿Qué parte de nosotros es lo que realmente nos pertenece? y ¿cuánto le pertenece a la sociedad?
Hola, sólo paso a saludar porque ya comenté esta entrada en myspace.
Cuídese, Blue!
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