La entrada a tan selecto lugar tiene un relación proporcional a los actos de bondad que el sujeto haya hecho en la tierra, durante su estancia en la vida humana, muchas veces la línea o el parámetro de decisión de San Pedro es difícil, cuando una persona es bueno en general pero ha hecho cosas no muy buenas, pero tiene buenos sentimientos, ha hecho comentarios acertados y tuvo buena letra.... que decidir ¿ cielo o infierno?
Ayer me enteré de algo; los humanos hacemos muchas cosas por interés, sí, no somos al cien honestos ni desinteresados, somos hipócritas y muchas veces esperamos algo, siempre esperamos la contraprestación de nuestro actuar, salvo con los perros.. sí! aun no conozco a alguien que se comporte con bonhomia con los canes esperando algo a cambio, mas bien lo hacemos por que sus ojos nos chantajean, por que juegan con nosotros, por que son nobles y fieles compañeros.
Así que San Pedro tiene un anexo a su lista de entrada al cielo, la de los que se han portado de manera correcta con desinterés con los perros, ahí están los que les compran helados a los perros callejeros, están los que en la noche cuando salen a cenar tacos le llevan 4 de pastor con todo a su mascota, los que les comprar juguetes, los que juegan con ellos cuando les roban los calcetines, los que permiten que se suba al sillón para ver juntos una película. Nadie en su sano juicio pensaría que al hacer eso estaría mas cerca de entrar al cielo.
Es un punto decisivo para San Pedro, por que si has sido noble con un perro, pues no debiste de haber sido tan malo con los humanos. ¿será cierto o de nuevo es un cuento que me contó mi fiel compañero para que no lo dejara dormir en el garage?
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