miércoles, 4 de junio de 2008

El supermercado

Una de las cosas que han ido evolucionando en mi vida es hacer las compras del super.

Cuando comencé a vivir solo, sucedió lo previsible que no esperaba: se vació el refrigerador sin darme cuenta, el cesto de ropa sucia crecía cual montaña inexpugnable, comencé a retrasarme en el pago de las cuentas de la luz, el gas, el agua.

Llegaba a mi casa solo a dormir, me la pasaba en la calle ya sea en la oficina o con los amigos, y los fines de semana pues me rendían poco para los pendientes domésticos.

Tuve que poner orden y dí gracias a Dios por la existencia de la lavadora y la secadora (no son tan complejas de usar; aunque admito que lo que mas odio en la vida es planchar). Así comencé a hacer mi super los lunes por la noche por que hay menos gente que sábados y domingos.

Mi carrito de compras ha ido modificando su preferencias, al principio eran puras comidas congeladas, pizzas, galletas, todo lo que en la casa paterna nunca compraban, obvio que estaba por lo menos el six de cerveza, botanas para los amigos, y mis gustitos culposos: carnes frías y quesos... y al momento de pagar DOUH!!!! el sablazo a la tarjeta de crédito.

Por esos inconvenientes económicos y de exceso de carbohidratos y cevada, mi carrito del super se ha vuelto mas austero, y en las compras nocturnas de los lunes, comenzaron a caer manzanas y plátanos, barritas de energéticas y de fibra, jugos que no se usarían para mezclarse con vodka, la cerveza salió y me limito a comprarla cuando se requiera pues tenerla en el refri es tentador en extremo. Mi carrito del super no tiene ingredientes que permitan ser chef domestico, me limito a cosas simples que pueda desayunar y cenar, hacer sandwiches, quesadillas, cereales, yogurth, fruta.

Una cosa que me molesta es hacer el super en el que acostumbro cerca de casa, pues las cosas están en otros sitios y luego no tienen las marcas o productos a los cuales juramos fidelidad, cerca de mi oficina hay un super al que voy cuando la agenda no me permite escaparme a hacer las compras de los lunes en la noche, y pues compro lo básico por lo menos para comer cereal.

Una época me hacía ensaladas para llevar al trabajo, así que los domingos en la tarde-noche, estaba en la cocina, lavando, partiendo, arreglando los insumos para mi combo mix de ensalada, soy fan de los aderezos y los crotones....

Disfruto hacer mi super, tener noción de lo que me gusta y lo que consumo, por que luego compraba de más o luego de menos, pero hay cosas que no salen del carrito, los quesos, las carnes frías y mis chocoroles.

4 comentarios:

Jo dijo...

vaya que me identifico ... cuando se esta solo se vuelve uno descuidado por momentos y el mas responsable de si mismo, yo aborresco la cerveza pero mi gusto culposo es tener siempre vino tinto o uno dulce espumoso no bebo leche... y de lo demas no sufro tanto se puede hacer tanto con pocos ingredientes... amo los croutones, la pasta es rapida... yo escapo entre semana y ahora soy mas ordenada llevo una lista y ya no salgo con cosas demas... a veces dan ganas de unos chocorroles jaja

HSR dijo...

Me sumo, la planchada es lo más nefasto, huyo de ella cual vampiro de una cruz.

El super siempre es una aventura. Y el tema de a qué super acudir revela mucho de la personalidad...¿será betoman acaso soriana, comercial mexicana (aunque dicen que eso no es super), walmart, superama, chedraui, sumesa, etc, etc, etc?

Unknown dijo...

Cuando relatas tus aventuras en el súper no puedo sino recordar las mías (qué curioso que estemos en un momento tan semejante, ¿no?).

Mi primer super fue de una cubeta, una escoba y menesteres de limpieza. Luego empecé con la comida y ahora llegué al mismo punto que tú. Compro cereal (que yo ni comía), leche, jugo, yoghurt... Afortunadamente para mí, Clauda sabe cocinar ¡y lo hace bien!

No moriré de hambre.

Betoman dijo...

Júbilo: yo no puedo vivir si no hay leche en el refri, la prefiero mucho antes q a la cerveza... cada quién JAJA.

Sampieri: pues por la cercania con mi casa y por que es el que mejor conozco, soy walmart (aunque por la costumbre aun le llame aurrera) Chedraui lo detesto, tiene la peor fruta,y confieso que prefiero los superama´s JAJAJA

Doktor Her Quentoqui: si, la vida nos lleva por caminos curiosos, siempre llenos de aprendizaje, lo cómico es cómo desde distintas realidades coincidimos en algo tan básico "hacer el super" haber si ahora con eso del amarre, y la buena cocinera no le caen unos kilitos de más, que le caerían muy bien a "ambos dos" JAJAJA saludos!!

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